Hace 32 años, aunque no se formalizó legalmente hasta el año 1987, iniciaba su andadura la primera cooperativa agroecológica del país. A instancias de varios vecinos del municipio de Reus, preocupados por la proximidad de la petroquímica de Tarragona y la central de energía nuclear de Vandellós, nacía la Cooperativa El Brot. Según Carme Pagès, presidenta de la misma, a pesar del desconocimiento general sobre agroecología, fue un proceso natural fruto de la necesidad de consumir alimentos frescos y sanos de la zona. De la mano de su presidenta, Interempresas ha visitado la sede de esta cooperativa pionera donde se impulsa, desde hace más de tres décadas, el consumo “crítico” de alimentos, desprovistos de tratamientos químicos y envases superfluos.
Hoy en día, términos como agroecología nos parecen de lo más habitual. Tres décadas atrás, la posibilidad de poner en marcha una cooperativa que fomentara agricultura sostenible sostenida por la propia comunidad, podía desconcertar a más de uno/a. Sin embargo, en el caso de la Cooperativa El Brot, con sede en Reus (Tarragona), las cosas fueron más sencillas de lo que a primera vista pudiera parecer. Así nos lo explica Carme Pagès, presidenta de la misma: “En un principio, había preocupación por la existencia y cercanía de la petroquímica de Tarragona y la central nuclear de Vandellós. A la necesidad de consumir alimentos sanos y frescos de la zona, básicamente de Reus y del Camp de Tarragona, se empezó a pensar en cómo optimizar transportes, en hacer circular información sobre posibles productores y proveedores, se empezaron a organizar charlas informativas sobre agroecología…Y así, con la ayuda de gente de confianza, una cosa llevó a la otra…”.
